mi motera acuatica 2 para mi amiga lorena
Bella entre las más bellas una escultura griega no podía apartar mi vista de tan lindo cuerpo es perfecta por donde la mires.
Me levante……
Mañana más
Me levante y gire muy despacio a su alrededor, sin tocarla solo admirando su precioso cuerpo ofrecido para mi deleite y me estaba recreando, sentía en mis pantalones la presión de mi pene contra la tela deseoso de salir de su escondite.
En un gesto de pudor se tapó con una mano los pechos y con la palma de la otra su preciosa rajita. Estaba tan bella y parecía tan inocente que casi no me atrevía a tocarla por miedo a romper el encanto del momento.
Me acerque por detrás aparte su larga cabellera para acercar mis labios a su fino y largo cuello depositando un fugaz beso sobre su piel de seda. Sentí el escalofrío que el beso le hizo sentir. Quito la mano de los pechos y pude ver que sus pezones estaban erguidos y firmes sus aureolas oscuras y perfectas. Con dos dedos pellizque suavemente un pezón, lo que provoco un tímido ahhhhh! Que exhalaron sus labios y pego su cuerpo al mío sentí su culito contra mi bragueta, y volví a besar ese cuello, mientras envolvía un pecho con una mano y la otra en su vientre, la suavidad de su piel el calor de su cuerpo. Dulce tormento irremplazable momento.
De un golpe le di la vuelta, su vientre contra mi vientre, su boca contra mi boca, mis manos sobre su cuerpo acariciando vorazmente, cada milímetro de piel, su culito respingón su larga espalda, inmerso en este lujurioso momento sentí como sus manos buscaban los botones de mi camisa que uno a uno tranquilamente fue desabrochando hasta que mi piel y la suya se unieron. Pude sentir sus pezones taladrar mi torso su vientre calentar el mío, sus manos por la espalda y sus uñas clavadas en mi piel. Nuestras bocas unidas nuestras lenguas entrelazadas en un profundo beso.
Me di cuenta que ella tomaba la iniciativa y soltaba la correa de mi vaquero, que saltaba el botón, que su mano se hundió por la cintura en mis pantalones buscando desesperadamente algo en mi bragueta. Lo encontró, y dios que lo que buscaba estaba poco escondido deseoso de sentir su tacto saltaba literalmente a su mano y ella lo recibió apretando fuertemente el tronco con toda la mano. Besaba mi boca mi cuello mi torso y así en un lento recorrido fue besando mi cuerpo hasta mi vientre, entonces se arrodillo ante mi desabrocho uno a uno cada botón de mi bragueta y de un fuerte tirón bajo mis pantalones hasta la rodilla acompañados por el bóxer. Por fin libre mi pene erecto con las venas marcadas lucia ya libre de su prisión de tela, lo cogió con las dos manos admirando su abultado glande y hermoso y largo tronco. Depositando un beso en el glande y luego a lo largo del tronco, mordisqueado suavemente arrancándome algún que otro suave gemido y arqueado mi espalda bajo sus suaves caricias.
Siguió con este placentero juego durante un largo rato hasta que sentí sus labios aprisionando mi glande, su lengua jugando con él en el interior de su boca succionando a la vez uffff dios que gusto, sus sabias caricias me estaban volviendo loco, no pudiendo resistirme más de una golpe de cadera introduje mi miembro casi entero en su cavidad bucal llegando a tocar la campanilla lo acepto y lo hundió ella misma aún más hasta quedarse casi sin respiración. El calor de su boca la suavidad de sus labios su saliva me terminaría arrancando un orgasmo en breve. Así que interrumpiendo en dulce momento la cogí en brazos y me la lleve a la cama depositándola con suavidad sobre las sabanas, era hora de que yo disfrutara su cuerpo y le diera placer también.